Jean Prouvé (París, 1901 – Nancy, 1984) empezó a trabajar como aprendiz en un taller de herrería, pasó por arquitecto e ingeniero autodidacta y terminó formando parte del selecto grupo de creadores franceses de vanguardia en la primera mitad del siglo XX.

Su obra es el resultado del trabajo de experimentación con los materiales y la industria; siempre involucrado de manera directa en la producción, nos lo imaginamos permanentemente con las manos en el metal, la madera… y lo que surgiera.

Personaje pionero y visionario, se adelantó a su tiempo en varias décadas primando la ligereza y la movilidad sobre la permanencia.

La idea de sistema, implícita en sus modelos de casas desmontables diseñadas para atender las necesidades de vivienda tras la segunda guerra mundial, resultaba tan novedosa por aquel entonces que es posible que ni el mismo Le Corbusier la comprendiera cabalmente.

El mobiliario estaba concebido con los mismo materiales y planteamientos que sus casas, para él eran parte de un mismo plan con el que atender de forma democrática las necesidades del habitar; otra visión que parece hoy premonitoria.

Imagen del  montaje de una casa 8×8 en 1945 e imágenes de la casa 8×8 instalada en la feria de arte de Miami.

 

Ahora sus creaciones han encontrado un destino inesperado y la galería parisina Patrick Seguin vende tanto piezas de mobiliario como casas completas, pasando por componentes recuperados de construcciones originales.

Esta galería creada en 1989 se ha especializado en figuras legendarias del diseño francés como Charlotte Perriand, Pierre Jeanneret, Le Corbusier, Jean Royère y… Jean Prouvé.

En 2013 se llevó a la feria de arte de Miami una de las dos únicas casas 8×8 desmontables originales que existen.